Saturday, April 22, 2023

PENÚLTIMA CARTA DE AMOR DESPERADO

 Cómo me puedes decir que nada de lo que hice te demuestra mi amor? Que soy un pusilánime? Hoy no tengo ganas de buscarte para no seguir enfrascado en el reproche inacabable de tu falta de confianza en mí y de mi culpa en ello, de que no tengo nada que ofrecer y que represento para ti un retroceso, una sinsalida, un obstáculo para tu felicidad, que lo que pasó no ha pasado sino que pasa y seguirá pasando inevitable e indefectiblemente, y que no entiendes nada sobre la forma en que hago las cosas, que soy egoísta y solo pienso en mí y que mi forma de ver y actuar es la única que existe para mí y mi total falta de empatía. Te dije que en mi relación con mis hijos hay una dificultad, que seguramente volveré a cometer errores pero nunca los mismos, no permitiré que te contraríen, pero temo angustiosamente que si no abordo la diferencia del modo que te parece correcto entonces voy a tener un problema muy serio contigo, tan serio como para querer irte de mi vida o no quererme y con cada intento se tensiona más el borde de la lejanía. El que sea yo el responsable del nuevo apartamento nos garantiza a ambos no abandonarnos porque nunca te voy a pedir que te vayas y voy a intentar persuadirte de que te quedes, aunque no te voy a forzar, como siempre.  He admitido mis errores y aunque me gustaría ser infalible probablemente me vuelva a equivocar, pero pase lo que pase te voy a proteger, sin embargo es difícil abordar el asunto porque en principio no quiero que veas para evitarte la incomodidad si alguno de mis hijos intenta ser irrespetuoso contigo o si Johanna trata de meterse. He actuado mal en el sentido de no haber parado a esa vieja inmediatamente porque no quería que te enteraras de ese trato vergonzante conmigo, por mucho que lo he pensado, mi actitud podía interpretarse como lo hiciste (también he admitido y ha sido motivo de petición de perdón), pero también porque en un principio tampoco quería ser injusto con Johanna o Jaime (sí, fui condescendiente e indulgente, te dí más razones para que creyeras y creyeran que tenían permiso para seguir sin límites) pero ahora, gracias a eso, tengo justificantes de sobra para no aceptar una postura conciliadora de Johanna a sabiendas de que podría ser una treta, o de Jaime, que siendo mi hijo no la va a tener fácil, y sin embargo, no quiero estar toda mi vida a la defensiva, en algún momento tendrán que ceder las cosas a mi favor, no bajo las condiciones de ellos como me dijiste sino de las mías, de algo habrán tenido que valer tantos años de trato amable de mi parte (desde otro punto de vista siendo un pendejo —incluso un tipo manipulable… y lo peor es que no hacía falta porque cedí mucho sabiendo que perdía, pero cuánto más tomaban más perdían ellos, p. Ej. Johanna lo perdió todo, hace tiempo que no la quiero, no tengo el más mínimo interés en ella ni como amigos*, excepto que le vaya bien y sea feliz porque con eso me saca de su sistema, se mantiene lejos y favorece a mis hijos) *alguna vez te dije que no me negaba a la posibilidad de ser amigos y lo intenté, además ella me ofreció su amistad varias veces y lo pensé y ahora me detesta porque la rechacé, pero es que ya no vale la pena y no le tengo confianza, sin embargo no sé qué haya en el futuro no como amigos pero al menos como adultos que compartieron mucho de su tiempo y se tienen consideración. Contigo llevamos muchos días en varias semanas o meses en que no hemos tenido paz y me has dicho de muchas formas que no te convengo, que no soy un buen tipo para ti y me has cargado de adjetivos que quiero olvidar, pero que estoy cerca de interiorizar, por lo que no me dan ganas de verte. Mis últimos recuerdos tuyos son de gritos y reproches, de palabras de desamor y de imposibilidades, de conclusiones horribles sobre mi persona y nuestro futuro… me quiero quedar con los aún frescos aromas de tu piel y tu cabello y tu sexo y tu sonrisa divina, tus pies bellos, tu voz y tus gemidos, tus todavía profundos sentimientos expresados de amor aunque ya escasos, tu admirable capacidad para curar el alma, pero no puedo seguir cuando no estás dispuesta a escucharme. Mis dos mejores amigas me dijeron desde el principio que eras una tesa y que en verdad me amabas porque no se hubieran metido conmigo si estuvieran en tus zapatos (y tuve miedo de perderte, de hacerte infeliz)… lo dijeron porque eres joven, no tienes hijos, yo tengo dos grandes y una ex loca (a ellas no les cae bien Johanna). Te amo, amo tu presencia en mi vida pero no quiero sufrir más, sufro porque sufres y siendo dañino me empiezo a detestar y te doy toda la razón cuando me reprochas y te autorizo a lastimarme… no quiero más eso, y hoy perdí la confianza en mí, no estoy seguro de poder seguir adelante y salir bien librado. No te envío esta carta debido a que aún más temor me da ser injusto contigo y que todo esto no exprese lo que en verdad importa y que no quiero que sufras por nada, mi amor. Te llevo grabada en mi alma, vida mía. Gracias por todo y por tanto y le pido a Dios que tengas tu jardín de Lirios. Dios te bendiga. 

No comments: